El alcalde de Río dijo que la medida ayudará a contener la propagación de la pandemia y que la gente podrá estar cerrada durante 24 horas.
Este jueves (19) la Alcaldía de Río de Janeiro informó que si no se siguen las recomendaciones para evitar el hacinamiento en el transporte público, es posible que la circulación del BRT sea suspendida.
Medida que busca reducir las posibilidades de propagación del coronavirus. Y esto sólo ocurrirá si las demás recomendaciones decididas hoy por el Ayuntamiento no surten efecto.
“Si con estas medidas se produce desobediencia civil por parte de empresarios, operadores del sistema y pasajeros, el BRT será suspendido. Esperamos que esto nunca ocurra. Sería un fracaso para nosotros como sociedad. Sin embargo, si fracasamos, el BRT se suspenderá durante 24 horas y, posteriormente, por períodos más largos”, declaró el alcalde Marcelo Crivella.
En Río de Janeiro, el BRT conecta las zonas oeste y sur de la ciudad, donde hay más casos de Covid-19, según la alcaldía.
El Departamento de Transporte por Carretera del Estado de Río de Janeiro (Detro), en ordenanza publicada este martes (17). Determinó que los vehículos de transporte público y las empresas de turismo que operan en la región metropolitana del estado únicamente deberán transportar pasajeros sentados. La determinación, según Crivella, no se ha cumplido.
Una vez más, les pido a los conductores que tengan la amabilidad de no detenerse en una parada de autobús cuando su vehículo esté lleno. Si el autobús está lleno, el conductor tiene la autoridad de detenerlo, guardar la llave en el bolsillo y negarse a continuar. En defensa de la vida de las personas presentes y de la suya propia, dijo.
BRT Río
Según BRT Río, hay una caída en el número de pasajeros. Si comparamos este último lunes (16) con la semana anterior, hubo una caída de alrededor de 30%.
En un comunicado, el Sindicato de Empresas de Autobuses de la Ciudad de Río de Janeiro (Rio Ônibus), que agrupa a las empresas operadoras del transporte carretero de pasajeros en la ciudad de Río de Janeiro y del sistema BRT, afirmó que trabaja continuamente con el gobierno y las empresas para controlar el embarque y la capacidad en los autobuses de la ciudad. Pese al esfuerzo, el Sindicato advirtió que no es posible hacer cumplir la determinación del Ayuntamiento de no permitir el transporte con pasajeros de pie sin el apoyo de las autoridades. “Entendemos la gravedad de esta situación y hacemos un llamamiento de apoyo”, dijeron.
Inspección de transporte
Según Crivella, la intención es intensificar la vigilancia del transporte público en la ciudad. Y para lograrlo, envió este jueves (19) una solicitud al Ayuntamiento para cambiar el horario de las guardias municipales. De 60 horas de descanso por cada 12 horas trabajadas a una jornada laboral de 36 horas de descanso por cada 12 horas trabajadas. Este cambio se mantendrá mientras se siga combatiendo la pandemia del Covid-19.
El alcalde afirma que con el aumento del horario de trabajo de los guardias se podrá intensificar las inspecciones, que actualmente se concentran en las principales estaciones, hacia otros puntos de embarque y desembarque.
Para evitar aglomeraciones, el alcalde pide también que circulen todos los vehículos, los cuales serán vigilados en las cocheras por inspectores de la Dirección Municipal de Transporte.
Hago un llamado a los empresarios. No priorizamos las ganancias de nadie, priorizamos la vida de las personas, por lo que los autobuses deben circular, todos deben estar en las calles. Esto reducirá la distancia entre ellos, dijo.