Ya sean tarjetas de crédito o préstamos, conoce la diferencia y descubre algunos consejos en este artículo para que puedas administrar adecuadamente tus recursos.
Al empezar a usar tarjetas de crédito, se cometen muchos errores, el más grave de los cuales es ignorar la naturaleza misma de las tarjetas y el coste financiero que conlleva. Casi de inmediato, el compromiso de pago mensual se incumple y se cae en el círculo vicioso de realizar solo los pagos mínimos, con lo cual la deuda tiende a perpetuarse.
Es necesario mencionar algunos aspectos sobre las deudas que se contraen al adquirir una tarjeta de crédito y advertir sobre el compromiso de realizar pagos regulares. Es muy fácil contraer deudas mayores si no se cuenta con la información necesaria.
Evite considerar la tarjeta como una extensión de su salario, y mucho menos como una forma gratuita de obtener recursos. De hecho, es un producto financiero que debe pagar para usarlo. Si deja de realizar pagos, esto puede causar graves problemas.
¿Cuál es el interés común?
Al pagar con su tarjeta, la entidad financiera emisora cobra los intereses habituales. Febraban define estos costos como el pago normal por el uso regular de la tarjeta. Se debe realizar un pago parcial si no se cubre la deuda total.
¿Cuáles son las tasas de interés estándar?
Cuando te atrasas en tus compromisos mensuales se produce una situación conocida como interés moratorio y es el monto que te cobra la entidad financiera cuando te atrasas en tus pagos.
Al no realizar el pago mínimo para continuar utilizando la línea de crédito autorizada por el banco, es necesario pagar los intereses normales y los intereses moratorios cuyas condiciones usted autorizó, por eso es tan importante estar bien informado antes de contratar cualquier servicio.
Si no cubres tus pagos de tarjeta mes a mes, puede ser un problema fácil de resolver si solo te atrasas uno o dos meses, pero con el tiempo la situación se vuelve bastante complicada.
¿Qué hacer cuando aumentan los intereses de demora?
Lo más importante es que te comprometas a pagar tus deudas. Recuerda que lo que destines a este pago no debe exceder el 30% de tus ingresos. Evita incumplir con los pagos o atrasarte en tus cuotas mensuales. También es recomendable que intentes cubrir más del mínimo y, de ser posible, pagues la totalidad de la deuda en un solo pago.
Evite acumular pagos. Si tiene problemas, no arriesgue su dinero. Una opción es buscar la orientación de una compañía de reparación de crédito para saber qué pasos tomar para liquidar sus deudas antes. Ellos pueden asesorarlo y elaborar un plan que se ajuste a sus necesidades.
